Simbolicamente

"Hay sueños simbólicos, y hay una realidad simbolizada por tales sueños. O bien, hay una realidad simbólica, y hay sueños simbolizados por tal realidad".

Puedes vivir constantemente dividido entre ambas premisas. En la primera, el sueño juega con tu realidad, le da forma y llegas a creerte que cada suspiro en aquella playa de madrugada, se convertirá algún día en realidad. Tu, allí, sólo en aquella fría playa, en verano. No sabría jugar con el sueño, ni con su realidad.

Prefiero creer que los sueños juegan con la realidad y que la cambian, que la reescriben al comprobar que su autor no hace bien los deberes. Prefiero pues soñar lo que la realidad me transfiere y cambiarlo.

El domingo pasará a ser lunes con todo lo que ello conlleva. Cuando quieras que hable, deja de decirlo y llegará el momento. Quizás sólo hace falta que llegue el momento.


Sigo espeso con las palabras. Duerme, Juan, duerme.